Poema de Ernesto Cardenal

 

epitafio para un guerrillero.

Al fin libre de la teoría y la práctica

de la revolución,

de los discursos interminables,

de los análisis, de la autocrítica,

y del autocontrol,

del trabajo voluntario y del trabajo obligatorio,

de los mitines, de las manifestaciones,

de las grandes decisiones históricas,

de los fracasos históricos,

de las acusaciones y las autodefensas,

de los interrogatorios y la tortura,

de las cárceles y las fugas,

de la vida clandestina,

del miedo a los delatores y del miedo a los compañeros,

del oportunismo y del sectarismo,

de la burocracia y del centralismo democrático,

de los dogmas y de la dialéctica,

de la historia y de la deshistorización.

Ahora descansa bajo la tierra libremente.

-Ernesto Cardenal